Muchas veces, tomar decisiones no es fácil. Las listas no dan respuestas, las reflexiones no fructifican. Así uno podría pensar que pintar seguramente no va a aportarnos nada, pero justamente con LOM se puede encontrar aspectos en los cuadros que pueden clarificar una u otra solución o que las dos variaciones sean posibles, tomando las correspondientes medidas. La presión desaparece y se puede tomar la elección optima en relación con la situación. Una mujer joven, con una relación estable desde hace unos años, se preguntaba si quería tener hijos en los próximos 4 años, o no. En un primer paso se pinta en poco tiempo dos autorretratos:
variación A: no quiero tener hijos
variación B: quiero tener hijos
Después de pintar los autorretratos se cuelgan uno al lado del otro y se observan. Que salta a la vista?
El retrato de la izquierda, variación A: no quiero tener hijos, parece más joven y más relajada.
El retrato de la derecha, variación B: quiero tener hijos parece más adulta y tensa.
La mujer se decidió por ser mas adulta y tener hijos incluso si esto significa mayor esfuerzo. Tres años y medio mas tarde dio a luz su primer hijo. Es agotador y muy bonito.